Secuela de la película de culto, protagonizada de nuevo por Darío Grandinetti, esta vez junto a Ariadna Gil y dirigida por Eliseo Subiela. Esta segunda parte está ambientada en Barcelona, donde Oliverio llega buscando a su viejo amor, con el que sin embargo, ya no consigue volar. Conoce entonces a una trapecista, con quien consigue parar el tiempo durante un breve momento.