Un clásico contemporáneo que lanzó a la fama a Juan José Ballesta y una de las películas más conmovedoras de los últimos años, dirigida por Achero Mañas. El Bola no tiene amigos porque tiene miedo de las reacciones de su padre, hasta que aparece un nuevo vecino en el barrio. El Bola encuentra en la familia de su amigo un refugio para la tristeza y la violencia.