Cuando Violeta decide hacer un viaje por la India con su nuevo novio, deja a su hijo Bernardo de 11 años con su hermano Pedro, un atractivo dentista homosexual, desinhibido en sus relaciones. Pedro cambia su comportamiento para que su sobrino no perciba su desenfrenado ritmo de vida habitual. Sin embargo, el niño se comporta con naturalidad, como si estuviera en su propia casa. Por su parte, Pedro tendrá que enfrentarse a responsabilidades completamente nuevas (colegio, educación, etc.). Pero, poco a poco, se establecerá entre ambos una relación muy tierna y cariñosa, algo absolutamente desconocido para Pedro..