Juana y Francisca sirven en un chalet de un matrimonio estadounidense. Sus respectivas parejas tienen un concepto posesivo y machista de lo que deben ser las relaciones entre hombres y mujeres. Cuando entran en escena dos pretendientes estadounidenses, las protagonistas se encontrarán en medio del choque de mentalidades de los dos bandos: los celosos españoles y los soberbios yanquis.